(SPUTNIK) MONTEVIDEO — El poder económico de Turquía constituye una presión extra para que los países eviten reconocer el genocidio armenio, dijo a Sputnik uno de los miembros de la Causa Armenia de Sudamérica, Viken Boyadjian.
“Turquía ha utilizado en numerosas oportunidades sus lazos comerciales y sus inversiones para tapar iniciativas de reconocimiento”, dijo Boyadjian, secretario ejecutivo del Consejo Causa Armenia del Uruguay.
El pueblo armenio que vivía en el imperio otomano sufrió una serie de deportaciones y ataques que alcanzaron su punto culminante en 1915 y derivaron en la matanza de 1,5 millones de personas.
Se eligió el 24 de abril como fecha de conmemoración del genocidio debido al asesinato en 1915 de más de 800 intelectuales y líderes políticos y religiosos armenios en la antigua Constantinopla (ahora Estambul), relata la web oficial de Causa Armenia de Uruguay.
Turquía es una potencia con recursos para establecer lazos económicos y comerciales que “priman sobre la diplomacia basada en principios” y esto se puede ver en América Latina, se quejó el activista.
La causa armenia en América del Sur
Los tres países de Sudamérica con comunidades armenias más numerosas son Argentina, Brasil y Uruguay.
A pesar de que Argentina, donde residen entre 50.000 y 120.000 armenios, reconoció el genocidio armenio por una ley nacional y hay escuelas, iglesias y plazas que honran a ese pueblo, Boyadjian comentó que el tema ha mermado en gran medida por las relaciones comerciales del país sudamericano con Turquía.
“Hay un montón de información y casos del estilo; incluso a veces hasta en detalles”, aseguró.
Esta “política de ajuste entre valores e intereses” comenzó en el segundo mandato de Cristina Fernández de Kirchner (2011-2015) a raíz de la necesidad de comerciar con Turquía, según dijo el profesor de la Universidad Torcuato Di Tella de Buenos Aires, Juan Gabriel Tokatlian, citado por el diario Clarín de Argentina.
En Uruguay, aunque las estimaciones difieren, llegaron tras el genocidio unos 8.000 armenios y hoy se calcula que la comunidad de descendientes supera las 25.000 personas.
Uruguay fue el primer país del mundo en reconocer el genocidio armenio.
El presidente Tabaré Vázquez saludó este lunes a la comunidad armenia durante un gabinete ministerial abierto, y este martes la Cámara de Diputados realizará un homenaje en el parlamento.
“Desde distintos poderes el Estado uruguayo el tema del reconocimiento está laudado; por eso nuestro trabajo es más de homenaje, de conmemoración, de agradecimiento a este país que fue pionero en el reconocimiento del genocidio”, dijo Boyadjian.
En Brasil vive una comunidad de 50.000 personas, y la mayoría se concentran en el estado de São Paulo.
Sin embargo, el país no ha emitido una ley nacional sobre el reconocimiento del genocidio.
“No hay una ley federal de reconocimiento ni ha habido un reconocimiento a nivel de Cancillería o de Presidencia, sí reconocimientos y actividades gubernamentales, pero a nivel estadual”, explicó el activista.
El genocidio tuvo lugar durante la Primera Guerra Mundial, cuando el Gobierno de los Jóvenes Turcos, que en 1908 había dado un golpe de Estado, ordenó la deportación de los armenios desde el este de la península de Anatolia hacia Siria, que era parte del imperio otomano.
Turquía ha reconocido que existió una política de deportación contra la comunidad armenia que se vio agravada por algunos incidentes, si bien la escalada de violencia fue también alentada por milicias armenias que desde Anatolia oriental apoyaban el avance del Ejército ruso.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, envió este lunes un mensaje de condolencias a la iglesia de Surp Vartanants, en Estambul, donde se celebró una de las varias ceremonias en recuerdo de la tragedia. (Sputnik)
Foto: Desde las 18hs se desarrolló por la Av. 18 de Julio de Montevideo la Marcha por la Justicia organizada por los Jóvenes Armenios de Uruguay, y que convocó a centenares de personas en torno al reclamo de justicia por el Genocidio Armenio. (22/04/2017, Consejo Causa Armenia del Uruguay)