Ante un nuevo ataque de Azerbaiyán a Armenia en vísperas de Año Nuevo y Navidad Armenia

El ejército de Azerbaiyán lanzó un ataque contra la República de Armenia en la madrugada del 29 de diciembre, con un intento frustrado de infiltración en la región fronteriza de Tavush, al noreste del país y un ataque con morteros y francotiradores al poblado de Chinarí.

Como resultado de esta nueva violación al cese al fuego reafirmado por las partes meses atrás, fueron asesinados tres soldados de las fuerzas armadas de Armenia, y un número no declarado de militares azerbaiyanos.

La gravedad del incidente motivó la condena del Secretario General de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) -que Armenia integra- quien expresó que “consideramos estas acciones en el territorio de un miembro de la OTSC como una provocación, especialmente en el contexto de un incidente grave en la República de Nagorno Karabagh con el uso de armamento pesado y vehículos blindados en abril pasado”. La referencia del Secretario General de la OTSC a la República de Nagorno Karabagh, representa una clara advertencia a Azerbaiyán por parte de la principal alianza militar de la región y un reconocimiento a una realidad consolidada que supera ya el cuarto de siglo.

Esta nueva aventura de Bakú representa una violación directa al cese al fuego firmado en 1994 por Armenia, Azerbaiyán y Nagorno Karabagh, así como también a los acuerdos presidenciales alcanzados en San Petersburgo y Viena, que pusieron fin a los enfrentamientos derivados de la agresión de Azerbaiyán a Nagorno Karabagh en abril pasado.

A la vez, este ataque a pocos días del Año Nuevo y la Navidad Armenia, representa una afrenta a los co-presidentes del Grupo de Minsk de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), quienes han instado a Bakú a respetar el cese al fuego acordado especialmente en las festividades.

El Consejo Causa Armenia del Uruguay repudia esta nueva agresión de Azerbaiyán y condena la actitud beligerante del régimen de Ilham Aliyev que continúa saboteando el proceso de paz y atentando contra la estabilidad en la región, con el lamentable resultado de nuevas pérdidas humanas.

Ante las festividades de Año Nuevo y Navidad Armenia realizamos un llamado a la comunidad internacional y al Grupo de Minsk de la OSCE a condenar firme e inequívocamente la conducta de Azerbaiyán, absteniéndose de las formulaciones que apuntan a equiparar responsabilidades entre las partes y que han demostrado ser funcionales solamente a quienes buscan una solución militar al conflicto, desconociendo la voluntad de Armenia y Nagorno Karabagh de alcanzar una solución pacífica.

Es tiempo de que el silencio de las cancillerías y las fórmulas de compromiso dejen de ser el refugio desde el que Azerbaiyán prepara cada nuevo ataque contra los habitantes de las Repúblicas de Armenia y Nagorno Karabagh.